BND Manuel Izaga

Cuarta conferencia

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Apóstol Manuel Izaga, pastor del Ministerio Buenas Noticias de Dios para las Multitudes de la ciudad de Barquisimeto.
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Audio de la cuarta conferencia, Apóstol Manuel Izaga.

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"Hay una nueva gloria profética sobre Venezuela y en esta nación ha despertado el espíritu de los gobernantes y el espíritu del sacerdote."

Los voy a ofender. Porque toda persona que lo mueven de su confort se ofende, ¿o no?

¿Tú sabes cuántos sueños de Dios han muerto por la palabra llamada promesa?

¿Tú sabes cuántas personas se han ido sin Cristo por la palabra llamada promesa? porque un pastor le dijo, ¿Dios está haciendo la obra? Dios no está haciendo nada, ¿sabes?

Dios lo hizo, consumado es. Eso lo que hace es alimentar irresponsabilidad. No te preocupes, sigue siendo vagabundo que Dios está haciendo la obra.

¿Tú sabes cuántos familiares tuyos se han perdido? Porque alguien te ha dicho, está en la promesa. Cree en el Señor Jesucristo y serás salvo tú y tu casa. Eso es verdad.

Pero el carcelero la misma noche se llevó a Pablo, lo sacó de la cárcel y lo llevó a salvar su familia. No esperes para salvar tu familia en el año 2024. Sálvala hoy.

¿Cuánta gente, amigos míos, los he visto morir con una sonrisa? ¿Qué pasó? Antes de tiempo diciendo Dios me va a sanar.

Dios me va a sanar. Esa es una mentira del diablo. Dios no te va a sanar. Dios no te va a sanar porque Isaías dice, Él fue herido por tus rebeliones, Él fue molido por tus pecados,

el castigo de su paz ya fue sobre Él y por sus heridas tú eres sano. Dios no te va a sanar. Tú eres sano. Si estás enfermo, grita, ¡Soy sano!

Es una mentira del diablo que la iglesia es futurista.

¿Tú sabes cuánto daño le ha hecho ese futuro a la iglesia? Porque eso es una mentira. Dios no tiene futuro. Jesús estaba tan claro que el futuro no existe, que Jesús dijo, no dejes para mañana lo que tienes que hacer hoy. No dijo que el día de salvación es mañana. Dijo, hoy es el día de salvación. Sabiendo que iba a sufrir, que lo iban a entregar y que lo iban a matar, le dijo a Judas, lo que vas a hacer, hazlo ya.

Yo le voy a hablar que en el primer mensaje de Jesús lo querían matar. Si esta palabra en Lucas 4:16-30, que les voy a predicar lo enoja, usted tiene que arrepentirse. Y si alguien te va a sacar de tú confort, te vas a enojar, y no se sube de nivel sin enojo. Cuánta gente anda enojado con las personas que les predican a los gobernantes, porque los ven con el presidente o porque se sacan una foto con el alcalde.

¿Por qué? Porque la iglesia cristiana se acostumbró que a este no le predico porque es brujo, al otro porque es rico, al otro porque es libre, al otro porque es político.

Ya la iglesia dejó de predicarle a la gente porque la gente se convirtió en su enemigo.

Resultado, las iglesias dejaron de crecer porque lo que no tenemos es a quien predicarle. Sin embargo, usted es un sacerdote que tiene que estar a favor de todos.

Lucas 4:16-30 “Jesús fue a Nazaret, donde se había criado, y en el día de reposo entró en la sinagoga, como era su costumbre, y se levantó a leer las Escrituras. 17 Se le dio el libro del profeta Isaías, y al abrirlo encontró el texto que dice: 18 «El Espíritu del Señor está sobre mí. Me ha ungido para proclamar buenas noticias a los pobres;
me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos, a dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos
19 y a proclamar el año de la buena voluntad del Señor». 20 Enrolló luego el libro, se lo dio al asistente, y se sentó. Todos en la sinagoga lo miraban fijamente. 21 Entonces él comenzó a decirles: «Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de ustedes.» 22 Todos hablaban bien de él y se quedaban asombrados de las palabras de gracia que emanaban de sus labios, y se preguntaban: «¿Acaso no es éste el hijo de José?» 23 Jesús les dijo: «Sin duda ustedes me recordarán el refrán que dice: “Médico, cúrate a ti mismo”, y también “Haz aquí en tu tierra todo lo que hemos oído que hiciste en Cafarnaúm.”» 24 Y añadió: «De cierto les digo que ningún profeta es bien recibido en su propia tierra. 25 A decir verdad, en los días de Elías, cuando durante tres años y medio el cielo se cerró y hubo mucha hambre en toda la tierra, había muchas viudas en Israel; 26 pero Elías no fue enviado a ninguna de ellas, sino a una viuda en Sarepta de Sidón. 27 Y en los días del profeta Eliseo había también muchos leprosos en Israel, pero ninguno de ellos fue limpiado sino Namán el sirio.» 28 Al oír esto, todos en la sinagoga se enojaron mucho. 29 Se levantaron, lo echaron fuera de la ciudad, y lo llevaron hasta la cumbre del monte sobre el que estaba edificada la ciudad, para despeñarlo. 30 Pero él pasó por en medio de ellos, y se fue.

Podemos leer que Jesús fue a Nazaret donde se había criado. Y en el día del reposo entró en la sinagoga conforme a su costumbre.

¿Cuál es tu costumbre? La de Jesús era leer. Y habiendo abierto el libro, encontró el texto. Diga, encontró el lugar. Dígale al vecino, en la Biblia encontrarás tu lugar.

El Espíritu del Señor está sobre mí por cuando me ha ungido. Levante su mano y diga, me ha ungido.

Para darle buenas noticias a los pobres. Me ha enviado a sanar a los quebrantados. Me ha enviado a pregonar libertad a los cautivos, dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos. Y a predicar el año de la buena voluntad de Dios. Dígale al vecino, este es el año de la buena voluntad de Dios para ti.

Verso 21, y comenzó a decirle, hoy se ha cumplido, ¿qué? Diga, dejó de ser pasado, dejó de ser pasado y dejó de ser futuro, y entró en el presente. Un profeta de Dios verdadero te lleva al presente. Un profeta de Dios te elimina tu pasado y te elimina tu futuro bonito.

Si usted creía que Dios lo va a prosperar, Dios no lo va a prosperar, eso es una mentira del diablo. Y usted va a pasar una vida diciendo, Dios me va a prosperar.

Y ya tiene 20 años diciendo, Dios me va a prosperar. Y no tiene casa, no tiene carro, no tiene comida en la casa, no tiene con qué dar una ofrenda y sigue diciendo, Dios me lo va a prosperar.

En 2 Corintios 8: 9 está escrito pues ustedes ya conocen la gracia de nuestro Señor Jesucristo que, por amor a ustedes, siendo rico se hizo pobre, para que con su pobreza ustedes fueran enriquecidos”.

¡Tú eres rico! Levanten la mano los ricos que hay aquí. ¿Tú eres rico? Amén. Dios no te va a prosperar.

Ya la unción de prosperidad está en ti. Yo profetizo que todo negocio que tú levantes se convierte en una empresa multimillonaria.

Dios no te va a prosperar. A la gente se le dice, un día te vas a morir. Tú no te vas a morir. ¿Sabías eso?

¿Sabías que tú no te vas a morir? ¿Sabes por qué? Porque en Gálatas 2:20 dice “Pero con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

Quiere decir que no te vas a morir, porque ya tú moriste con Cristo. Tú moriste con Cristo. Pero no sólo eso. Dice la palabra que en la cruz tú fuiste juzgado con Cristo, condenado con Cristo, sepultado con Cristo, resucitado con Cristo y estás sentado con Cristo en las alturas. ¡Apláudele!

¿Tú sabes por qué la gente le tiene miedo a la muerte? Porque esto no se le ha revelado. Cuando a ti se te revela eso, le pierdes el miedo a la muerte.

Yo no le tengo miedo a la muerte, porque la muerte no tiene poder sobre mí. Porque ya morí con Cristo. Y no es que voy a resucitar. Yo resucité con Cristo, lo dice Hebreo 2:7.

Dice que resucité con Cristo y estoy sentado con Cristo y tengo la mente de Cristo. Agarre eso. Dígale al vecino, tú no te vas a morir. Ya tú moriste.

Diga, nadie te puede juzgar. Ya tú fuiste juzgado. Diga nadie te puede condenar, ya tú fuiste condenado.

El diablo no tiene autoridad sobre ti, porque tú resucitaste y tú venciste la muerte cuando Cristo denunció la muerte.

¿Tú sabes cuál es el problema? La parte de revelación. ¿Cuál fue la diferencia con el gran apóstol Esteban?, que él se entregó a la muerte.

Y el diablo lo mató antes del tiempo. Hay gente que está con Dios, pero Dios no se lo llevó. El diablo lo mató antes del tiempo, y eso lo dice Pablo.

Pablo dijo que, por no entender la unción del cuerpo, hay unos enfermos, otros debilitan y otros se fueron. Están con Dios, pero Dios no se los llevó, se fueron antes del tiempo.

Cuando Esteban vio venir la muerte ¿Qué hizo Esteban cuando vio venir la muerte? ¡Se tiró de rodillas! Y dijo, Señor, en tus manos entrego mi espíritu. Tirado de rodillas frente a la muerte.

¿Pudo salir corriendo? A mil kilómetros por hora y nadie lo alcanzaba.

A Pablo lo mataron tres veces. Tres veces resucitó.

Le colocaron un montón de piedras y a los pocos minutos la gente vio las piedras moviéndose. Y de aquí salió un hombre sin un hueso fracturado. No tenía un hueso fracturado.

Se levantó del montón de piedras, se paró frente a la muerte y le dijo, ¿dónde está tu aguijón? Tú no puedes conmigo. Si tú tienes cáncer, hoy te sana. Si tú tienes diabetes, hoy te sana.

Si tú tienes artritis, hoy te sana. Porque la muerte está desactivada. Le dijo, ¿Dónde está tu aguijón? ¿Dónde está tu victoria? ¿Tú sabes lo que le dijo Jesucristo a la muerte? En el libro de Ósea dice, oh muerte, yo soy tu muerte. Jesucristo es el asesino de la muerte.

Conviértete en el asesino de la muerte. Conviértete en el asesino de la diabetes. Conviértete en el asesino de la artritis. Conviértete en el asesino del cáncer. Conviértete en el asesino de los problemas cardiovasculares. ¡Conviértete!

¡Conviértete en la muerte! Aquí hay gente que tiene que desafiar la muerte hoy. Y que tiene que dejar de estar acariciándola.

La gente dice “Es que esta es la herencia de mi papá. Yo tengo la misma diabetes que tenía mi papá”. Buena herencia, te dejo. Mi papá se infarto a los 50 años. Quizás yo me infarto a los 45. Tú tienes que salir de esa mentira del diablo.

Porque tú no tienes que ver nada con el apellido de tu papá. Porque la Biblia dice que tú no fuiste engendrado ni de sangre, ni de carne, ni de voluntad humana.

Tú eres un engendro de Dios. ¿Quién eres tú?

Tú no eres lo que te ha dicho tu marido, que eres un engendro del diablo. No, tú eres un engendro de Dios.

Tú no eres lo que te ha dicho tu suegra, que tú eres un engendro del diablo. No, tú eres un engendro de Dios. Tú eres una nueva criatura.

Tu vida pasada terminó en Cristo. NO me importa cómo fue tu pasado. Pero tu vida pasada terminó en Cristo.

Tu vida futura terminó en Cristo. Y el único día que tienes para vivir es hoy. Vívelo con intensidad, con pasión, con alegría, ¡Con gozo!

Jesús conocía esto. Lo conocía a tal nivel que le dijo a Judas, lo que vas a hacer, hazlo ¿cuándo? Hoy. Ni un día más, ni un día menos.

¿Cuándo dijo Jesús que era el día de salvación? Hoy. ¿Cuál es tu día para prosperar? Hoy. ¿Cuál es tu día para sanarte? Hoy. ¿Cuál es tu día para dar el mejor beso? Hoy. ¿Cuál es tu día para darle el mejor abrazo? Hoy. ¿Cuál es tu día para reconciliarte? Hoy. ¿Cuál es tu día para dar la mejor ofrenda? Hoy.

¡Y hoy es tu día para dejar el pasado atrás y decir, nunca más volveré a ser pobre, nunca más volveré a andar enfermo, nunca más volveré a andar triste, me levantaré como todo lo que soy, un hijo de Dios! Por eso es que yo le voy a recomendar algo a usted, como pastor.

Si Dios no lo mandó a hacer cosas a usted, no se ponga a hacerlas y después a echarle la culpa a los demás. Nadie tiene por qué financiarlo a usted.

La gente que lo va a financiar a usted, Dios los toca y lo financian.

Jesucristo dijo Jesucristo “Traigo buenas noticias para los pobres”.

Traigo buenas noticias para los que están llenos de odio, resentidos, amargados. Vine a sanarles el corazón. Porque usted no es prosperado con un corazón enfermo.

La prosperidad comienza en su corazón. Dijo, vine a darles una visión de negocio. Hoy te va a caer una visión de negocio.

Vine a decirte a ti, que, a partir de este congreso, lo que comienza para ti es el año agradable del Señor.

¿Sabe qué es tremendo? Cuando cae la unción de agradable.

En el verso Lucas 4:19 dice “y a proclamar el año de la buena voluntad del Señor».

Hoy se rompe la crisis de Venezuela con esta palabra que voy a predicar. No es la crisis tuya la que se va a romper, Es la crisis de la nación. Te estoy profetizando.

Israel, después de aquella palabra de Cristo, se convirtió hoy en la octava potencia del mundo. Venezuela, después de este congreso, se convertirá en el paraíso de América. ¡Alaba la gloria de Dios!

Israel venía pasando por una crisis, que habían llegado a comerse a los hijos.

En Venezuela no he leído en las noticias que alguien se comió el hijo. Esa sí que fue una hambruna. Este mensaje es profético.

Este mensaje, la única forma que lo agarres tú, es que tú seas venezolano y tener el espíritu nacionalista encima para que esta opción te caiga. Porque yo dejé de predicarle a los evangélicos, yo le estoy predicando a la nación.

Porque mi corazón fue transformado. Yo no estoy pensando en una iglesia. Yo no estoy pensando en una red de iglesias. Yo no estoy pensando en una federación. Yo estoy pensando en que toda Venezuela conocerá a Jesucristo como Señor.

Y que en Venezuela se levantará un sacerdocio santo que ama a la gente y que los cuida. Y se levantará una gente que hará gobierno.

Yo traigo reforma hoy.

Mi escuela, mi nueva escuela superior hoy, se llama Reyes y Sacerdotes. Porque Jesucristo murió como apóstol, murió como profeta, murió como evangelista, murió como maestro,

pero solo resucitó con tres usos: Profeta, Rey y Sacerdote. Porque Adán era Profeta, Rey y Sacerdote. ¿Sabes qué va a pasar en esta hora?

El Rey que está en ti se va a despertar. Y cuando se despierte el Rey que está en ti, nunca más volverás a ser empleado de nadie. El Rey que te levantará a montar tu propio negocio y a tener tu propia gerencia.

El Rey está dormido. Diga, ¿qué necesito apóstol para que se despierte el Rey?

Quizás tú eres un pastor, pero la iglesia no te provee para nada.

Tienes una iglesita estéril que no diezma, que no ofrenda. Tienes una ovejita que cuando la ordeñas lo que da es sangre materna. Una gente empobrecida. Eso hay que cambiarlo.

Si usted es libre financieramente usted pone las directrices.

Y el que paga manda, amigo mío. El que pone la música le dice que son va a bailar.

Diga, renuncio a que me den las directrices. Diga, las únicas directrices que voy a aceptar son las directrices de Dios.

Es porque no necesito que me estén financiando. No es que sea malo, sino que cuando tú me financias y todo el tiempo alguien te está proveyendo, tú no ejercitas tu fe.

Muchas veces el pastor se desgasta peleando con la gente, luchando con la gente y no pasa nada. Diga, el día que te obstines de la miseria y del problema, ese día Dios te dará una revelación para salir adelante.

El día que te obstines de la miseria, de la ruina, del fracaso, ese día Dios te dará una revelación.

Este año parirás negocios y las empresas. Porque si no, vas a seguir dependiendo de las migajas.

Y cuando hay migajas, cuando la gente tiene el espíritu de migajas, a Zacarías le llevaban niñitos para que los cuidara el día sábado. Hay gente que quiere alimentar tu crisis.

Diga, despertó el profeta y cuando despierta el profeta en ti, lo que tú digas será hecho. Y tú te moverás en una dimensión, fusionado con el cielo.

Y cuando tú te fusionas con el cielo, tú eres invencible y eres agradable.

La gente te va a buscar para bendecirte, la gracia estará sobre ti y la gente va a decir que bien lo estás haciendo.

El predicador sin gracia no va a funcionar, porque nadie lo invita. Cuando una persona me llama a mí para que le invite a predicar, yo no lo invito, porque la tierra no se ofrece, el sembrador busca la tierra.

Hay una nueva gloria profética sobre Venezuela y en esta nación ha despertado el espíritu de los gobernantes y el espíritu del sacerdote.

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